🧞♂️¿Currar con amigos?
Hace unos meses comenté que un amigo me invitó al evento de un club de inversión donde presentaban una operación tuercepenes.
Si no estabas por aquí, te la perdiste. Es lo que hay.
Ese amigo, en el tren de ida a Madrid, o en el de vuelta, o ya en el evento, no sé cuándo, tenía yo mucho sueño, no me acuerdo, me dijo:
–Podría haber venido solo a este evento. No habría pasado nada. Pero si yo tengo dinero para pasar el día en un yate, no quiero estar solo en el yate. Quiero compartir la diversión con amigos, y por eso quiero que si a mí me va bien, a ellos también le vaya bien.
El dinero te muestra tal y como eres.
Si eres generoso, vas a ser mucho más generoso. Si eres un puto desgraciado, serás un desgraciado con dinero.
Punto.
Si crees que el dinero te cambia, o cambia a tus amigos, o tienes amigos de mierda o has construido relaciones de mierda. Háztelo ver.
Te cuento esto porque se acerca el verano, y en mi bar necesito manos.
Manos para poner cañas y dominar con maestría el sutil arte de freír croquetas, no apto para todo el mundo.
Hay que estar puto creisi de las croquetas como yo para hacerlo como Jesucristo Parera Topuria manda.
Primer problema:
No tengo ni puta idea de contratar. Es normal. No lo he hecho nunca. Nadie ha nacido sabiendo contratar. Yo no iba a ser más.
Segundo problema:
No puedo fallar. A ver, lo más normal es que falle contratando, pero no puedo fallar. No puedo quedarme en julio o agosto sin plantilla. No puedo. Me voy a tomar por culo antes de eso, porque se me jode el negocio. Y no puedo permitir eso. No he abierto en noviembre en Mordor para joderla en verano. No. No puedo. Nein. Nope. QUE NOOOOO.
Vale.
En un alarde de lucidez/genialidad/inspiración/magiapotagia, voy a contratar a un amigo de mi grupo de amigos.
Literalmente amigos desde 2º de la ESO.
Ventajas de contratar a un amigo: le puedo insultar, me puede insultar, le quiero, me quiere, me respeta, le respeto, me entiende, le entiendo, le ayudo, me ayuda, sé lo que quiere, sabe lo que quiero, sé sus aspiraciones, sabe las mías.
Y no sé si me dejo alguna.
Desventajas: no saber separar el trabajo de la amistad.
Respecto a esto, tuvimos una charla de una hora donde puse sobre la mesa todo. Todo es todo. Sueldo, condiciones, lo que necesito de él, lo que va a recibir a cambio y lo que está por venir.
Es cuestión de tiempo, cuestión de tiempo te digo, que haya un Mequetrefe en el pueblo de al lado, otro en Alicante, otro en Valencia. Tiene que haber uno en cada playa desde Niza hasta Jerez de la Frontera. En fin, cuestión de tiempo. Guarda este tuit.
Cuando la empresa crezca, los que están conmigo desde el principio crecen en consonancia. Eso significa estar en puestos de dirección de lo que cojones quieran (me da igual, ellos deciden), cobrar acorde a eso (muchos billeticos) y pasárnoso de puta madre montando cosas y disfrutando de la vida sin trabajar ni estresarnos demasiado.
Yo haría eso con todos mis amigos, y conforme vaya creciendo los iré tentando, porque quiero que si a mí me va bien, a ellos les vaya igual de bien.
Si quiero pasar un día en un yate, ese día quiero compartirlo con ellos.
Este amigo que empieza el mes que viene me propuso currar él, yo no lo busqué.
Necesito gente de máxima confianza a mi lado para dar pasos cortos pero firmes.
Enfocado y con disciplina.
No puedo contratar a un hijo de puta y a mitad de verano enterarme de que me está robando pasta de la caja.
La vida son apuestas. Y yo apuesto por mis colegas.
Aunque en este vídeo lo cuento mejor: